Los
pisos de alto impacto se caracterizan por su resistencia al impacto
generado por otros materiales o elementos que caen sobre la superficie del
concreto. Este tipo de impactos, que son tan sencillos como el golpeteo de los
zapatos sobre el piso, el impacto de herramientas que caen en el suelo o
incluso la vibración del piso generada por el proceso de producción, desgastan
el piso y acortan su vida útil.
A la larga se presentan
daños sobre la superficie y es necesaria una reparación para prevenir
accidentes. Los pisos de alto impacto resisten estos daños y alargan la vida
útil del piso.